Top 10 de los castillos más asombrosos de Alemania

Alemania tiene un pasado aristocrático que sigue presente, y podemos disfrutarlo visitando alguno de nuestro top 10 de los castillos más asombrosos de Alemania, o incluso todos, ¿por qué no? Estas edificaciones de ensueño, que se conservan maravillosamente en el tiempo, nos trasladan a historias vividas por reyes, reinas y nobles que dieron forma, de una u otra manera, a la actual Alemania. Si deseas pasar unos días estupendos, visita Alemania en un tour privado con tranquilidad y construye nuevas vivencias y recuerdos.

Durante la época de la Alemania feudal la construcción de fortalezas proliferó con el objetivo de preservar el poderío germano. Gracias a ello hoy tenemos la oportunidad de recorrer asombrosos castillos; cuyas instalaciones nos permiten fantasear con ser algún noble caballero o una encantadora princesa. Algunos castillos están tan cerca como a distancia de una hora del más grande aeropuerto alemán; otros más lejos e igual vale la pena visitarlos.

Los 10 castillos más asombrosos de Alemania

Algunos castillos de Alemania se encuentran rodeados de arquitectura reciente, lo que realza lo antiguo y lo actual de este hermoso país. Y para disfrutar entornos de ensueño al visitar los 10 castillos más asombrosos de Alemania, puedes escoger entre recorridos en barco, por tren, paseos en avioneta, en carro, transporte público e incluso en funicular. Porque en Alemania las posibilidades de recrearse con la magia de la vida son infinitas, aprovéchalas al máximo.

El Castillo Eltz, la joya sobre el valle Mosela

Este castillo medieval se ubica a 70 metros sobre una colina y revela una vista que te permite percibir un entorno mágico. Una joya exclusiva conservada en perfecto estado por las 33 generaciones de una misma dinastía que lo habita desde el siglo XIII. En su interior, espacios como la cámara del tesoro protege obras de arte en oro y plata, exquisita joyería, cristal, armaduras, escudos, máscaras y más; solo un pequeño abrebocas de lo que admirarás allí.

Castillo de Cochem 

Ser testigo por mil años de historia alemana convirtió a esta fortaleza en una vía estratégica entre Francia y Alemania. El Castillo de Cochem tiene 50 habitaciones y en su interior aún continúan un hermoso comedor de 5 metros de largo, el salón gótico, el cuarto romántico, el cuarto de caza, la sala de ceremonias y la sala armas. Y, si decides navegar por el río Mosela, igual podrás visualizar al palacio Cochem en todo su esplendor.

La Fortaleza de Neuschwanstein o la nueva piedra del cisne

Un castillo digno del más hermoso cuento de hadas. Y uno de los grandes legados arquitectónicos que impulsó el rey Luis II de Baviera, llamado también el rey soñador. El palacio de la fantasía se ubica imponente a mitad del majestuoso bosque de Baviera. De forma amena y asequible llegas al castillo desde Munich, subiendo al tren que va a Fussen; y en la vía disfruta la fenomenal vista, luego en bus viajas 8 minutos hasta la base del castillo.

El Castillo de Hohenzollern

Por la maravillosa vista panorámica que ofrecen las almenas del castillo vale la pena visitarlo. Un castillo construido para la nobleza alemana más admirada, ya que su embelesador diseño dio hospedaje en algún momento a los reyes de Prusia. El hermoso castillo de Hohenzollern alberga en su interior una valiosísima colección de joyas reales; la más impactante es la corona de los reyes, hecha con oro y perlas. Recuerda recorrer el salón azul y las capillas medievales.

Castillo de Heidelberg 

El castillo de Heidelberg es como un gigante rojo mal herido, que mantiene invicto su valor en los Alpes. Para acceder a sus instalaciones puedes escoger entre el funicular o la caminata. Al llega disfruta la vista desde sus hermosos jardines, también captura un buen momento junto al barril de vino más grande del mundo. Y, como cada verano llega al castillo el festival cultural de castillo, haz tus planes, vístete de etiqueta y disfruta varias movidas de alta nobleza. 

La Fortaleza Albrechtsburg

La ciudad de Meissen sabe que posee una hermosa joya arquitectónica de estilo gótico, restaurada en el siglo XIX y enclavada en una pequeña y hermosa colina. Su exterior imponente contrasta con su ambiente interno tan acogedor, también ofrece a sus visitantes una vista despampanante. Además, te permite disfrutar algunas vivencias del pasado alemán, incluso en su momento el castillo dio cabida a una producción de porcelana muy interesante.

El Castillo de Moritz y su emoción barroca 

La ciudad de Moritzburg exhibe este bello palacio que se enclava sobre una isla artificial. Fue construido en 1546 como pabellón de caza para el Duque Moritz de Sajonia; luego se le añadió una capilla, un bello parque diseñado en U y lagunas. En 1776 se le anexó el pequeño Castillo Pheasant, luego la hermosa fuente de Venus, un pequeño puerto, un malecón y un faro. Ostenta una bella serie de carruajes reales y una colección mágica de cuernos de ciervos rojos.

El Castillo de Katz o Castillo del gato

Recorrer el legendario río Rin podrá llevarte hasta esta hermosa fortaleza; la vista desde allí te dejará en completo éxtasis. Una construcción digna de ser declarada Patrimonio de la Humanidad y que se planta segura y firme sobre un acantilado. El conde William II de Katzenelnbogen ordenó su construcción por allá por el 1371; y en sus viñedos se cultivaban la uva blanca de variedad Riesling. Napoleón lo atacó en 1806 y entonces fue reconstruido.

Castillo de Marksburg

Siguiendo la ruta del río Rin aparece imponente el Castillo de Marksburg, una hermosa arquitectura medieval alemana también declarada Patrimonio de la Humanidad. Subir hasta el castillo pondrá a prueba tus piernas y pulmones; el premio: una vista única y exclusiva ante tus ojos. Este palacio jamás fue conquistado ni destruido, por eso mantiene su estructura original y puede llamarse acertadamente una fortaleza.

Castillo de Mespelbrunn

En este punto lo medieval y lo moderno se entrelazan, ya que el Castillo de Mespelbrunn en Baviera está a solo 65 km de Frankfurt. Posicionado en un hermoso valle, hoy esta hermosa edificación refleja la serenidad y la calidez que antaño con seguridad faltaban en su interior. Y es que su foso era la protección requerida para que enemigos y visitantes indeseados abandonaran sus pretensiones de conquista. Hoy su hermosa y serena vista nos transporta.