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¿Sois de esas personas que prefieren la aventura de viajar sin compañía?¿Nunca lo hiciste? ¡Este otoño es tu oportunidad!. Dicen que el otoño nunca viene sólo, tiene una pizca de introspección que se puede aprovechar para conocerse mejor a uno mismo. No dejes de darte una chance para recorrer los lugares más lindos y combinar vacaciones, descanso y una bocanada de aire nuevo para salir al mundo renovado. Para eso, te presentamos los mejores planes para viajar solo este otoño.
La pandemia dejó en nosotros una sensación de tiempo perdido, de que no logramos aprovechar al máximo esos momentos de poco trabajo, por eso hoy en día está tan presente la idea de viajar, de la manera que sea, se volvió muy común ver a viajeros sólos, disfrutando de viajar por el mundo, y por ellos mismos.
Nueva york en otoño es especial
Nueva York es un destino muy común dentro de todos los viajeros, ya que tiene una gran cantidad de culturas, idiomas, personas, gustos, debe ser de los destinos más abarcativos que hay a lo largo del globo, pero en otoño tiene esa particularidad, ese aire, ese “nosequé” que hace que sea tan especial.
Las verdes hojas de los árboles del Central Park se convierten en amarillas, los pájaros de la zona que aprovechan para cantar, pasear por los jardines de una ciudad de cemento imponente, hacen que te sientas todo el tiempo en una película de Hollywood. ¡Si mirás bien hasta vas a poder ver a Spiderman saltando entre los edificios!.
La noche estrellada francesa
Francia, y su amor a la francesa, junto al otoño hacen de una combinación perfecta. No podemos asegurarte la parte del amor, pero si que vas a pasar unas vacaciones únicas, donde podrás conocer la fuente de inspiración del mismísimo Vincent van Gogh.
La parte sur de Francia tiene una pizca de frugal, provenzal y también algo impresionista, y mucho más si empezamos por Arlés.
Conocer los motivos de las más de 300 obras creadas en 15 meses por el pintor holandés puede ser el mejor de los hilos conductores para descubrir esta hermosa campiña francesa, a través de estas pinturas. Podremos encontrar los pueblos de Les Baux de Provence, Saint-Rémy-de-Provence (ubicación del hospital St Paul de Mausole, dónde Van Gogh pintó La Noche Estrellada) o Arlés y sus itinerarios a través de cuadros como “La Casa Amarilla” (Place Lamartine) o “Café la Nuit” (Plaza del Forum).
Un retiro artístico en Hawaii
Conectar con la naturaleza también hace de estas oportunidades algo único, donde podrás ver la parte más introspectiva de viajar sólo, o con tu propia compañía. Vivimos en tiempos donde la productividad nos pasa por arriba, y por más que sepamos dónde y cuándo viajar a desconectar, quizás nos falta un empujoncito para dar ese paso. ¿Qué mejor que hacerlo en una de estas islas paradisíacas de Hawaii?
Ala Kukui es donde encontramos un retiro residencial que se creó después del ataque terrorista del 11 de septiembre en Nueva York y que tiene como objetivo ayudar a sanar los trastornos producidos por esta tragedia.
Este centro de retiro se encuentra en un espacio rodeado de abundante naturaleza y con vistas al océano. Se trata, pues, de un auténtico santuario en el que se incluyen una gran variedad de actividades como la danza «hula», clases de escritura o yoga.
Oleaje perfecto en Taghazout, Marruecos
A menudo asociamos erróneamente el surf con el verano, pero lo cierto es que cuando se trata del Atlántico, la mejor época para bailar sobre las olas es el otoño. Pero, ¿por dónde empezar a buscar la ola perfecta? Nuestra sugerencia es Taghazout, un pequeño pueblo pesquero bereber al norte de Agadir donde la comunidad hippie llegó en los años 60.
Anchor Point es la cuna del surf para los surfistas intermedios, mientras que los más experimentados encontrarán el mejor reto en Boilers, gracias al impacto de las montañas del Atlas en esta costa de ensueño. Como telón de fondo, el Marruecos más tradicional, cientos de historias suspirando tras las puertas azules y la ilusión de no saber si, en algún momento, se estará surfeando el Atlántico o el propio desierto.
Conocer el Halloween de verdad
Irlanda está de celebración este año por muchos motivos: Dublín ha sido incluida en la lista de lo mejor para viajar de Lonely Planet, y es el centenario de la publicación de la emblemática novela de James Joyce «Ulises» y del nacimiento de Bram Stoker, autor de Drácula.
Halloween tiene su origen en la antigua fiesta de «Samhain», la celebración del final de la temporada de la cosecha. En aquella época, los galos creían que ese día las fronteras entre el mundo de los vivos y el de los muertos se volvían un poco borrosas: los muertos volvían a la vida y causaban estragos en los vivos.
El miedo, el otoño, el Samhain. Esta fiesta pagana fue el germen del actual Halloween y este otoño podrá vivirla en Irlanda a través de diferentes eventos como la folclórica Púca que se celebra en Meath y Louth, o el Halloween de Derry en Irlanda del Norte.
Si viajas solo, no te preocupes, los pubs te invitan a compartir más de una Guinness con un local y los dragones Targaryen te vigilarán en todo momento.
Desconectar para conectar
El aroma del fuego, las hojas secas y el incienso. Los espíritus parecen brotar de las calabazas y los árboles nos invitan a desprendernos de nuestras propias hojas secas. El otoño es la estación más mística del año y habla de la muerte, el renacimiento y los festivales de todo el mundo se alinean con estos procesos vitales. De hecho, actualmente se distribuyen miles de lámparas de arcilla por toda la India para ser encendidas el 24 de octubre durante el Diwali, la celebración más importante del gigante hindú y la excusa perfecta para invitar a la buena fortuna a través de ciudades llenas de magia.
Si se opta por Occidente, México comienza en octubre los preparativos para su Día de los Muertos (2 de noviembre), una oda a La Katrina, altares llenos de flores de cempasúchil y chupitos de tequila en honor a los que se han ido pero siempre vuelven una vez al año.
