Tabla de contenidos
Cuando se habla de ciudades que se han infravalorado nos referimos a que ese lugar se encuentra en un reconocimiento por debajo de su valor justo o real. Pero también se puede definir como que se le ha valorado menos de lo que se podría o debería. Por lo general, los viajeros cuando planifican un viaje piensan en aquellas ciudades que son muy conocidas por sus arquitecturas, gastronomía, museos, cultura o actividades.
Sin embargo, existen otras ciudades que no son tan conocidas en Europa que pasan desapercibidas o que no se ha planteado visitar; quizás por falta de información, vías de comunicación o propaganda, pero que igual tienen una belleza única, a veces hasta deslumbrante, que pueden superar las expectativas de muchos; al igual que sus monumentos, cultura y gastronomía.
Por este motivo, en este artículo se presentan algunas de estas ciudades infravaloradas del continente europeo, para que lo tomen en cuenta en unas próximas vacaciones, bien sea en pareja, familiar o en solitario.
Ciudades infravaloradas hacia Europa Occidental:
En la Provincia de Castilla y León, Zamora, en España:
Ciudad que posee el mayor número de iglesias románicas de los siglos XII y XIII del continente europeo; unas 24 de ellas aproximadamente. A la vez, presenta una buena cantidad de edificaciones modernas, después de Barcelona y Melilla. Muy conocida la Santa Iglesia Catedral, con su cúpula de estilo bizantina, la torre románica y el claustro, donde se localiza el museo con la colección de tapices de estilo flamenco.
En la época de semana santa Zamora se caracteriza por su celebración tan impresionante. Además de su excelente gastronomía, también muy poco conocida, entre ella está el arroz a la zamorana, un plato en donde se combina carne de cerdo y pimentón, cocinados en horno; pero no es lo único, sus tomates también son muy famosos.
Otro dato interesante es la producción de vino de las bodegas de Toro, a las orillas del río Duero, a nivel de la famosa finca Numanthia de LVMH. Una región vinícola que muchos podrán conocer gracias a los trenes de alta velocidad AVE, que salen desde la ciudad de Madrid y que solo tardan una hora en llegar a la provincia de Zamora.
En la región de Occitania de Francia, Narbona:
Localizada hacia el sur del país francés, cercana a los Pirineos, con un paisaje, gastronomía y cercanía a playa que hasta ahora ha pasado desapercibida. Narbona es una ciudad, pero también una comuna del departamento de Aude. Por lo general, cuando se menciona el sur de Francia inmediatamente viene a nuestra mente Toulouse, Montpellier, Marsella, Arlés o la Riviera Francesa.
Se le conoce por una zona costera de turismo, las famosas playas, sus diferentes paisajes, incluyendo lagunas de poca profundidad y algunas mesetas boscosas. También por la Catedral de estilo gótico de San Pastor y San Justo, cuya construcción se inició en el siglo XIII pero que no se llegó a concluir. Igualmente, cerca de la misma se localiza el Palacio de los arzobispos, con 2 museos interesantes: el de arte y el arqueológico.
También se encuentra en Narbona el Horreum, un conjunto de laberintos subterráneos, los cuales funcionaban como almacén de los romanos en la época en que era un puerto; datan del siglo I a.C. Tampoco se deben perder el Museo Romano Narbo Vía, el cual se centra en las antigüedades de ese pasado romano. También cuenta con el Parque Natural de Narbona, en donde puede apreciar a los flamencos o realizar rutas a caballo.
Ciudades infravaloradas hacia Europa Central:
Berna, capital de Suiza:
La ciudad se encuentra atravesada por el río Aar, y su casco viejo de arquitectura medieval desde 1983 pasó a la lista de Patrimonio de la Humanidad. Esta parte vieja está llena de columnatas, fuentes, boutiques, atelier, bares, restaurantes, cafeterías, entre otros. Para el 2009 se ganó el 9no lugar de la ciudad con mayor calidad de vida del planeta. Berna es una ciudad manejable, pequeña, de gente abierta y amable; disfrutando del agua del río.
No tiene aeropuerto internacional, pero sí cuenta con suficientes conexiones ferroviarias. Una región con mucho que ofrecer, como los montes de Mönch, Eiger, Schilthorn y Jungfrau. Igualmente, sus fiestas tradicionales como la de Chásteilet y cualquier tipo de actividades al aire libre.
En la época de invierno en Berna Oberland se realizan las competencias de esquí. Posee 350 Km de pistas, 200 Km para los paseos o senderismo de invierno y también excursiones con las famosas raquetas de nieve; y hacia la región alta del Cantón de Berna un paseo corto, entre otros.
En la península de Istria, Opatija, en Croacia:
Opatija, conocida como la Riviera del Adriático, se considera la cuna del turismo en este país; no solo por su preciosa arquitectura, sino también por los 30 Km que se localizan entre la costa del golfo de Kvarner y la ladera de la cordillera de Učka; siendo en su época muy visitada por la élite Austro Húngara, sobre todo desde finales del siglo XIX, siendo el centro de salud hasta la 1era Guerra Mundial.
Opatija tiene mucho para conocer, como la Iglesia de Saint James del siglo XV y su monasterio, y la Iglesia de la Anunciación, por su arquitectura. También Saint. James Park, donde reside el Jardín Botánico de Opatija, el cual alberga más de 150 especies de plantas que proceden de algunos países lejanos. Además de la Fontana de Selena y Helios, representando a la luna y el Sol.
En esta ciudad la naturaleza es la gran protagonista, y no podemos dejar de mencionar al Parque Natural de Ucka, famoso por su flora y fauna. A 1 hora en coche se localiza el Parque Nacional de Risnjaky, con bosques llenos de trufas de esta península de Istria y hermosas playas de la isla de Krk.
También, para los amantes del arte, se cuenta con la escultura a nivel de la costa de “La Joven de la Gaviota” y en Veprinac, edificios de tipo medieval y algunas ruinas prehistóricas.
Ciudades infravaloradas hacia Europa del Este:
La 2da ciudad más importante de Grecia, Salónica:
Tesalónica o Salónica es una ciudad de tipo portuaria perteneciente al país de Grecia, a nivel del golfo Salónica, en el Mar Egeo. Su historia conserva evidencias de las civilizaciones romana, bizantina y otomana, sobre todo alrededor de la ciudad Ano Poli. Se observan las ruinas del palacio del emperador romano Galerio, que data del siglo IV, manteniendo la Rotonda; el edificio más antiguo de esta ciudad y que ha sido tanto iglesia como mezquita.
En Salónica hay suficiente cultura y arte para conocer durante varios días. Encontramos antiguas ruinas, museos desde arte clásico y contemporáneo, murallas imponentes de tipo bizantinas, iglesias majestuosas, pero también tienen elegantes plazas, tiendas, paseos marítimos, entre otros.
No tiene el gran encanto de Atenas, pero sí posee muchos lugares de entretenimiento, eventos culturales como el Festival Internacional de Cine, pasear en autobús o en ferry para llegar a las playas más cercanas. Tras el incendio de 1917 en el centro de la ciudad este fue reconstruido en el siglo XX, con estilo europeo pero moderno. Su población es enérgica, joven y optimista.
En la costa de Polonia, Gdańsk:
Gdansk es una ciudad portuaria de Polonia a nivel de la costa del Báltico. En el centro, reconstruido después de la 2da Guerra Mundial, se encuentran las fachadas del Mercado Largo, que en la actualidad alberga restaurantes y tiendas.
Muy cerca de este mercado se ubica la Fuente de Neptuno, una estatua de bronce del Dios del mar, y que ha sido un símbolo que viene desde el siglo XVII, haciendo alusión a la relación que tiene esta ciudad con el mar Báltico. La ciudad tiene mucha historia que contar, además de una excelente gastronomía. Por ejemplo, el museo de la 2da Guerra Mundial, que se dice que es el más completo.
Gdansk ha sido el núcleo del comercio del ámbar a nivel mundial y que se conoce desde la época del Neolítico; lo cual permitió construir un recinto amurallado a comienzos del siglo XI; las tiendas de la ciudad venden continuamente esta resina fosilizada.
También se puede visitar el memorial Westerplatte, en la península del mismo nombre, donde se localizaba una fortificación militar, actuando como la resistencia de Polonia durante la 2da Guerra Mundial. Igualmente, el castillo en Malbork, el más grande del planeta en cuanto a su extensión y el mejor conservado del continente europeo.
A nivel de la historia más contemporánea se ubica el museo Europejskie Centrum Solidarnosci o Centro Europeo de Solidarnosci, el cual también es biblioteca y centro de investigación para la exposición de la lucha sindical y la oposición anticomunista de Europa del Este. Por último, y si lo prefiere, puede tomar un paseo en barco por el mar Báltico, todo un espectáculo.
